Atrás quedaron los días de las palabras de cola larga. Esto no quiere decir que ya no debamos optimizar nuestro sitio, sino que la forma de hacerlo ha cambiado. Ahora debemos pensar en cuál es la intención de búsqueda.
Google ha evolucionado lo suficiente para ya no depender de las "long tail keywords" por lo que es un error seguir optimizando de esta manera.
Por ejemplo, si busco "recetas para chilaquiles" y "cómo preparar chilaquiles" Google entiende que es la misma búsqueda. La intención de búsqueda es aprender a preparar chilaquiles.
Los buscadores - en especial Google - entienden el motivo de la búsqueda. Es decir, si estás buscando "cómo preparar chilaquiles" y "recetas para chilaquiles" tu intención es encontrar una manera de hacer chilaquiles.
Al optimizar para aparecer en las búsquedas por palabras de cola larga estamos eliminando muchas oportunidades porque hacemos que nuestra búsqueda tenga que ser muy específica.
Dicho de otra manera, es mejor optimizar para palabras de cola media porque Google entiende la cual es la intención de una búsqueda. De esta manera al optimizar por una intención estás optimizando para varias palabras clave (ie. "cómo preparar" y "receta de").
Google sabe lo que estás buscando a partir de inteligencia artificial pero también porque tiene años y años de datos y clicks.
Miles de personas han buscado "cómo preparar chilaquiles". La respuesta es tan obvia para Google que no hace falta mandarte a una página de internet - Google te enseña la respuesta desde el "featured snippet" (la caja generada por Google).
Si necesitas más información puedes darle click e ir a la página. Si no, ahí está tu respuesta.
Aunque no nos guste a los marketeros, Google trabaja para los usuarios, no para nosotros.
Esto significa que no importa que tan bonita, larga, cargada, etc sea nuestra página, esta no va a rankear si no ayuda a los lectores. Google siempre va a presentar las páginas que mejor resuelvan las dudas de quienes realizan las búsquedas.
Antes de preocuparte por el SEO tienes que asegurarte que :
Tu misión es encontrar, basándote en los resultados actuales, qué es lo que la gente quiere encontrar.
En los últimos 20 años la búsqueda de palabras clave a cambiado relativamente poco.
Buscas una palabra clave en Google Keyword Planner. Encuentras las palabras relacionadas con más búsquedas y menos competencia y listo.
Puedes seguir utilizando tus métodos de siempre pero yo te recomiendo también hacer esto.
Una mejor manera de hacer keyword research es literalmente buscar las palabras por las que queremos rankear una página y ver los resultados.
Pro-tip: Esta búsqueda hazla en modo incognito 🕵️♀️
Google nos demuestra que según ellos, quien busca "juguetes para perros" tiene la intención de comprar juguetes para perros por lo tanto sus resultados son en su mayoría tiendas.
¿Quieres un paso más allá?
Busca en Yahoo Answers que aparece cuando buscas tu palabra. En el caso de juguetes para perros:
Otros lugares donde puedes buscar son:
Lo que quieres encontrar es la intención general a partir de tus palabras - sin quedarte atado a Google.
Existen 3 tipos de búsquedas:
Entender qué es lo que quiere quien busca te ayudará a crear contenido optimizado para tu lector.
¿Tu lector...
Las búsquedas de información corresponden al 80% por ciento de las búsquedas pero no por eso significa que son las que más convierten.
Las transaccionales son las búsquedas que por lo general se enfocan al fondo del embudo.
Alguien que busca un termino muy genérico no está listo para realizar una compra.
Aún si pones una promoción o un link directo al carrito de compras, cuando tu palabra clave no coincide con la intención de búsqueda - es difícil que puedas mover a tus lectores dentro de tu embudo.
¿Cuál es la intención en cada una de estas búsquedas?
Ok. Este es un tip solo para ti: No pienses en palabras clave.
Piensa en temas. Optimiza para temas más que en palabras clave para ver mejores resultados.
Volviendo al tema de los chilaquiles - las palabras clave pudieron haber sido "recetas..." o "formas de preparar..." pero el tema es cómo hacerlo, cuáles son los pasos a seguir, etc.
Google entiende esto. Por eso no importa cuales son tus palabras clave si no qué es lo que quieres encontrar.
Ahora es tiempo de revisar tus páginas.
Compara las palabras clave que usaste para optimizar tus artículos con la intención según Google. Dependiendo de los resultados, decide si tu página es informativa, transaccional o de navegación y a partir de ahí, agrega o elimina los elementos que sean necesarios.